<<Hola amigos, os voy contar de manera
breve cual es mi situación laboral.
Yo soy un "contratado" de Correos,
así nos llaman a los que trabajamos en Correos cubriendo una baja, las
vacaciones de algún compañero, o lo que es más habitual, de refuerzo, es
decir, ayudando a los carteros con el reparto cuando estos no pueden más,
algo que es habitual ya que los barrios son demasiado grandes y no paran de
crecer con las nuevas construcciones. Aparte de los contratados, los
carteros se dividen en funcionarios o personal laboral fijo, que poseen
peores condiciones laborales, aunque realizan el mismo trabajo. Esto es así
porque desde hace varios años ya no pueden entrar funcionarios nuevos en
Correos con vista a una futura privatización de la empresa, todo lo que se
contrata desde entonces son laborales, para eso hay que aprobar un examen;
ni que decir tiene que se presentan muchos y solo unos poquitos lo pasan.
Los contratos suelen ir desde los 2
a los 15 días, quizás 1 mes durante las vacaciones de verano, y aunque parezca
que la empresa solo recurre a ellos de forma puntual, os diré que en el distrito
donde me encuentro trabajando actualmente somos 6 contratados, frente a 3
funcionarios y 2 laborales fijos, o sea, más de la mitad. Así, la rotación
es continua, encadenando contratos cortos y cambiando de puesto de trabajo
continuamente.
Yo empecé hace 3 años trabajando los
sábados (esa es otra modalidad que no he nombrado), sólo los sábados, ya que
los fijos no trabajan todos los sábados, y luego me han ido llamando a
diferentes sitios (al menos siempre dentro de mi provincia de residencia). Mientras más lejos de tu casa, menos
dinero ganas, ya que tienes que descontar los
costes del transporte, que corren por tu cuenta. Tampoco te pasan la ropa,
total, para lo que dura tu contrato... Pero lo peor es que no te dan ningún
tipo de formación, te llaman una tarde para que te presentes en tal sitio al
día siguiente, y a buscarte la vida: un sitio nuevo, sin conocer el programa
informático que tienes que manejar, ni nada, y exigiéndote que rindas como
los demás, dependes de que los compañeros más viejos te quieran echar una
mano, es algo estresante.
A partir de uno de julio entra en
funcionamiento una bolsa de empleo con algunas novedades, entre las que yo
destacaría estas:
- La dependencia a los intereses de
Correos al permitirte únicamente dos renuncias por estar trabajando en otra
empresa. Aunque no trabajemos más que unos pocos meses al año, todas las
personas inscritas en las bolsas debemos estar disponible en todo momento.
- La evaluación en el desempeño, en
base a la opinión que tenga de ti el jefe de turno. Una evaluación de
desempeño negativa supondría decaer de la bolsa (estar arriba es un requisito imprescindible
para poder acceder al puesto como personal laboral indefinido).
Y ahora, pasando a otro asunto,
aunque yo conozco perfectamente como está el mercado de la vivienda en
España, he querido, para completar este informe, recoger algunos datos y me he
pasado esta tarde por una inmobiliaria que está construyendo pisos en una
buena zona de Sevilla, cerca de uno de los accesos de lo que será el futuro
metro; sí, este es el sitio ideal donde me gustaría vivir. Me atiende una
chica guapísima y supersimpática que me enseña una maqueta y empieza a
contarme cómo son los pisos. Le pregunto por el precio, me dice que tienen
pisos de 2, 3 y 4 habitaciones. Pues... dime del de tres. Son 229.000 € más
IVA (o sea, varios miles de euros más). Uh... mejor dime el precio del de dos:
188.900 € más IVA, con ochenta y tantos metros cuadrados, con opción a comprar un
trastero por 3.000 € más y una plaza de garaje por otros 18.000 € (más IVA, por
supuesto). Tampoco me dice lo que cuesta hacerle la escritura al piso, que
debe salir por otro pico.
Ahora la pregunta es: ¿Cuánto puedo
ganar yo? No llega a 1000 € mensuales, hagan cuentas, porque a mí no me
salen.>>